SCA 3ra. Clase gral. La falta de objeto. Soluciones entre lo imaginario y lo simbólico.
A cargo de Mariel Robledo y Carina Magallán.
En el mes de mayo tuvimos el gusto de escuchar el recorrido trabajado por docentes locales del CID San Luis: María Carina Magallán y Mariel Robledo, quienes nos orientaron respecto a la lectura de las clases 5 y 6 de El Seminario, libro 4 “La relación de objeto”.
La primera parte de la clase estuvo a cargo de Carina, presentó al Lacan estructuralista que vemos en estas clases; él que lee a Freud en lo que se conoce como su “Retorno a Freud” y a sus principios. Momento clave en un contexto de mucha producción por parte de las otras corrientes del psicoanálisis, los postfreudianos.
Carina nos recuerda que, en estas clases, Lacan retorna a Freud en “La organización genital infantil” (1923), para ubicar la fase fálica, cuyo eje es el falo y su articulación al complejo de castración. La lectura de Lacan es para extraer el complejo de castración y pasarlo a términos estructurales, esencial para el establecimiento del orden simbólico.
Carina, nos trae una referencia de Miller en “Introducción a la lógica de la cura de Juanito, según Lacan” (1993); allí éste ubica un intento de Lacan de formalización dinámica de la situación analítica.
A continuación, la docente presenta el falicismo, como lo que va ubicando ese pasaje de lo imaginario a lo simbólico en relación a lo edípico y a los alcances de la falta de objeto. Se ubican los pasajes que se refieren a la falta, y el papel decisivo del falo, sobre todo en las mujeres a quienes les falta su correlato real. Por lo que nos introduce en la triada imaginaria “madre – niño – falo”. Señala este movimiento de la tríada imaginaria a la función simbólica, por medio del deseo materno, y como a partir de ello y habrá consecuencias en la estructura subjetiva.: neurosis, en la psicosis. De allí el nombre del programa de este año: “Consecuencias clínicas de la sexualidad femenina”.
Carina ubica el debate contemporáneo sobre la sexualidad femenina, fundamentalmente a las analistas postfreudianas Melanie Klein, Karen Horney y Helene Deutch, respecto a sus concepciones sobre el «conocimiento inconsiente de la vagina» en la niña, desde el comienzo, la feminidad radical e innata, el complejo de masculinidad como defensa. Punto que ubica lo que degradan estas teorías, el papel decisivo del falo en su función simbólica, como correlato de la falta, a partir de la castración materna.
Por tal motivo, la docente subraya el descubrimiento de la castración materna, y el momento donde hay una llamada al elemento simbólico que venga a simbolizar esa falta: el padre; punto donde pueden darse diferentes soluciones: la fobia o el fetichismo.
Para finalizar la primera parte de esta clase, Carina compartió una viñeta clínica de su práctica, para pensarla a la luz de lo desarrollado en la clase.
La segunda parte de la clase estuvo a cargo de Mariel, quien nos presentó un recorrido a partir de puntuar que Lacan desde el inicio de este Seminario nos mostró que el análisis se mueve y opera en la relación entre dos sujetos presentes en el análisis, el analizado y el analista. A partir de ello la docente desarrolla el Esquema Lambda, en donde encontramos la relación del sujeto con el Otro, tal como está constituida en el comienzo de un análisis.
En contrapunto a lo expuesto, ubicó a los posfreudianos para quienes “La relación entre analizante y analista se concibe al principio como establecido entre un sujeto, el paciente y un objeto exterior, el analista”. El analista se concibe aquí como real.
Mariel, comenta el caso de la Sra. Ruth Lebovici, y seguidamente presenta una articulación teórica al respecto. Subraya que dicha posición no suele tener un felíz desenlace. Por lo tanto, es que, a partir del grado de dominio de la intervención, de esa forma brutal de recordarle las convenciones, es lo que señala que el analista está en posición como real, como objeto real y hace que el sujeto pase al acto y encuentro en lo real el lugar perfecto. Lo cual indica la relación del sujeto con el analista en posición de objeto real, que como se sabe, no suele tener los efectos más deseables.
Seguidamente, la docente realiza un preciso recorrido por el caso de la joven homosexual y toma la articulación que el mismo Lacan refirió respecto al texto de Freud: “La organización genital infantil”. Allí plantea como un principio la asunción fálica y es subrayada la paradójica afirmación sobre el falicismo, el cual es el eje alrededor del cual se debe desarrollarse la interpretación teórica. Y para finalizar el recorrido y precisión del caso, Mariel, nos comparte un interrogante: ¿en la práctica clínica, en la interpretación analítica que sucede?
Agradecemos a Carina y Mariel, la calidez y conversación que genera dicho encuentro de trabajo.
Reseña Patricia Rojo López- CID San Luis